Hoy se cumplen 18 años de uno de los acontecimientos que más marcó mi infancia.
Hace 18 años el Volkswagen Golf que conducía Drazen Petrovic se estampaba contra una pared dejando al mundo sin uno de los mejores jugadores que ha pisado una cancha de baloncesto. BC Sibenka, Cibona de Zagreb, Real Madrid, Portland Trail Blazers y New Jersey Nets fueron los clubes que disfrutaron de la magia de este croata que también agrandó la leyenda del basket yugoslavo, con cuya selección se proclamó campeón del mundo y del Eurobasket.
Recuerdo una entrevista qe le hicieron a Epi cuando se retiró. Le preguntaron quién fue el mejor jugador al que se enfrentó y él, sin dudar ni un instante, respondió: Drazen Petrovic. Palabras mayores...
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